Por boda destino, entendemos aquellas bodas que se realizan en locaciones distintas a las de origen de los novios; por ejemplo, vivir en New York y hacer tu boda en Hawái. Básicamente, es un tipo de boda que amerita que los asistentes se trasladen a otra región o, en algunos casos, hasta otro país.
Este tipo de bodas es popular, pero no son tan comunes como se piensa, principalmente por todas las implicaciones y complicaciones que trae organizar a una cantidad grande de gente, en un lugar lejano y hacer todo lo necesario para que todo salga bien. En el caso de los que debamos organizar una boda así, tenemos un reto importante por delante.
Si es complicado organizar una boda y complacer a la novia en locaciones cercanas, solo debemos imaginar lo que representaría tener que hacerlo a kilómetros de distancia.
Cuando trabajamos en esto, debemos estar de mano con la novia e intentar hacer contactos en el sitio en el que será el evento, de tal forma que podamos resolver exitosamente y cumplir con los caprichos de los enamorados. Otra opción, sería trasladar a alguien en manera de representante de tu empresa, quien permanecerá en el lugar hasta el día de la boda y será tu enlace con el sitio.
Dentro de estas primeras consideraciones, hay que tener en cuenta el capital que tenemos o el presupuesto de nuestro cliente para que podamos trabajar de manera adecuada y cubrir todos los aspectos necesarios. Hace una boda en otra región representa un gasto significativo en cuanto a transporte y, si debemos llevar cosas desde el lugar de origen, estos costos podrían ser aún más significativo.
Por lo tanto, es importante cubrir con todo lo que podamos desde el lugar en el que se realizará el evento y transportar solo lo necesario con la intención de reducir algunos gastos al mínimo, de tal forma que pueda hacerse mayor inversión en el sitio, en comida o en traslado de invitados, en caso de ser necesario.